Querida clienta molesta.
Carta a esa clienta simpática. Hoy no hay reseña, hoy no hay tag, hoy no hablare de nada relacionado con la literatura. Hoy simplemente, quiero desahogarme, ya que no he podido hacerlo en mi puesto de trabajo, por que la gente es tan cobarde que prefiere llamar por teléfono en vez de hablar y amenazar a la cara. Si alguien llega a leer esto (gracias por estar aquí), resumiré la historia brevemente. Llevo trabajando casi cuatro meses en una tienda de ropa de cama, en mis días de formación vino una señora y se llevó una colcha y varios cojines (creo recordar, no estoy segura) y dejó encargadas las cortinas compañeras de la colcha. No damos nunca una fecha para los pedidos ya que no es un tema nuestro, eso lo gestionan desde central, yo pido, si hay me lo mandan, si no, pues nada. Las cortinas de esta mujer, a día de hoy, no han llegado. Pues bien, hace cosa de un mes, mes y medio, vino a la tienda a preguntar por las cortinas, le explicamos la situación y, aunque algo antipática (c